¡Hola familia dulce! Hoy cumplimos en este blog el 10° Aniversario y para celebrarlo con todos vosotros, os he preparado una tarta muy especial que lleva dos postres que me encantan, un Baklava Cheesecake.
Antes de comenzar a hablar de la receta de hoy, debo dar las gracias a todos por haberme acompañado en estas cocinas durante estos 10 años. Ha sido todo un placer para mí, poder conocer a grandes personas que hoy en día puedo llamar amigos, gracias a este rincón y además... hoy poder lograr uno de mis retos que era, poder celebrar el 10° Aniversario de Especialmente dulce, porque durante todo este tiempo... hemos pasado tantos acontecimientos (incluso una pandemia 💪🏻😅) que a veces... no me lo han puesto nada fácil estar por aquí.
Pero estoy muy feliz de poder celebrar este cumpleblog y aunque mi cocina, no tenga lujos para sorteos ni regalos especiales, os ofrezco lo mejor que sé hacer en ella, que es compartir una de las mejores recetas que se van a quedar en el recetario de esta cocina... y es que hablando de esta tarta, os podría contar mil cosas y todo bueno, porque me encanta tanto el Baklava como las tartas de queso y es que en un día tan especial, juntar ambas elaboraciones en una, solo me ha quedado disfrutar de cada bocado y con pena... de que se terminara 😜
Hacer un Baklava es algo muy fácil si lo hacemos con hojas de pasta filo refrigeradas, que podemos encontrar en nuestras tiendas de confianza, ya que si hacemos la masa casera es algo más entretenida y la verdad que aún no me he animado a prepararla nunca. Aún así, al tener que pincelar una a una cada hoja, se lleva tiempo, ya que tenemos que hacerlo con mimo, para que no se rompa, pero tampoco quedarnos dormidos, porque las otras hojas que quedan a la espera de ser pinceladas y colocadas en el molde, correr en el riesgo de que se sequen. Así que es un trabajo que hay que hacer sin prisas, pero sin pausa y tener siempre cuidado, de tapar muy bien aquellas hojas que no estemos utilizando, con un paño (o dos si no llega a cubrir toda la masa bien), para que el aire no las reseque y ya no podamos manipularlas.
La mantequilla que he utilizado es mantequilla sin sal que he clarificado, para que suelte ese color dorado y avellanado que le da un sabor muy rico. Se puede hacer con mantequilla derretida, como hacemos habitualmente con otras recetas, pero a mí me gustaba más así. Además es muy fácil de preparar... Solo necesitamos hervir la mantequilla a fuego medio alto, para que los líquidos se separen de los sólidos y dejar que estos se doren un poco (sin que se quemen), y retirar del fuego. Luego fultrar por un colador de tela y disfrutar del delicioso aroma que desprende esta mantequilla. (Ten en cuenta... que debes añadir más cantidad de la que indique la receta, para cuando retires los lácteos de la mantequilla, tengas el peso que necesitas para hacer la elaboración 😉).
La receta de la Cheesecake, no es otra que la tarta de queso sin pesar ingredientes que compartí hace un tiempo aquí y que para su elaboración, utilizamos los mismos envases de los ingredientes que usaremos para hacerla, para medir los demás. La he hecho en varias ocasiones (y sé que vosotros también) y aunque varíe un poco la cantidad que echemos, siempre queda bien.
He variado el tiempo de horneado, para adaptarla a esta nueva receta, con un poco de más cantidad de queso y limón, en lugar de vainilla y queda igualmente cremosa y deliciosa.
Y es que el conjunto del crujiente del Baklava, con los frutos secos en su interior, con la cremosidad de la tarta de queso, la hacen ser brutalmente adictiva y aunque me no me guste decir que una receta es de 10, porque pongo el listón muy alto (y ya se sabe que... como pasa con todo en esta vida, luego te quedas con cara de... no es para tanto🤷🏼♀️ jajaa...,) me suelo contener... pero como es un día especial, me lo vais a permitir... y es que ¡está de 10!
¡Vamos con la receta!
Baklava Cheesecake
Receta
Ingredientes para 8 o 10 personas
(Molde de 22 cm)
Para el Baklava
- 200 gr de nueces naturales sin cáscara
- 150 gr de mantequilla derretida o clarificada
- 100 gr de pistachos naturales sin cáscara un poco más para decorar)
- 1 paquete de pasta filo refrigerada (la mía traía 14 hojas)
- Rosas comestibles (para decorar)
Para el almíbar
- 100 gr de agua
- 100 gr de azúcar glacé de la Azucarera
- La piel y el zumo de medio limón
Para la cheesecake
- 3 huevos tamaño L (180 gr en total)
- 1 tarrina de 350 gr de queso crema Philadelphia
- 1 tarrina de 20 cl de Nata fresca extracremosa (Crème fraîche) de President
- 1 envase de Nata fresca de Nata para montar (200 gr)
- 1 envase de queso crema de azúcar glacé de la Azucarera (190 gr)
- 1 cucharada sopera colmada de harina fina de maíz Maizena (unos 25 gr)
- La ralladura de 1/2 limón
Elaboración:
Lo primero que vamos a preparar es la tarta de queso; Echa en un bol el queso crema y la Nata fresca (si no encuentras, la puedes sustituir por la misma cantidad de yogur griego natural sin azúcar) Ahora utiliza el envase del queso, para rellenarlo hasta el borde de azúcar en polvo (glacé). No aprietes el azúcar, ni golpees el envase contra la mesa, para que entre más cantidad. Solo déjala caer y échala en el bol, junto a la ralladura de limón. Ahora mezcla bien con un paleta o una varilla, hasta que quede cremoso y no haya grumos.
Sigue añadiendo la Maizena y vuelve a mezclar, hasta que se integre bien. Añade los huevos de uno en uno, mezclando lentamente hasta para evitar que entre aire a la masa y por último, rellena el envase de la nata fresa de 20 cl, con la nata para montar sin llegar al borde superior, para intentar añadir los 200 gr que nos hace falta (si tienes un brick en casa de esta cantidad, mucho mejor) y mezcla brevemente, solo hasta que veas que está integrada en la masa y reserva en el frigorífico.
Para hacer el Baklava; prepara la mantequilla derretida o clarificada (la que más te guste) y reserva. Píncela con ella el molde de 22 cm y cada hoja de pasta filo, pero antes recuerda tapar las hojas restantes con un paño de cocina, justo inmediatamente después de sacarla de su envoltorio de fábrica, para que no se reseque y se estropeen. Vamos a necesitar un mínimo de 12 hojas (3 en cada capa), en mi caso el paquete tenía 14 y aproveché para poner dos hojas más en la parte de la base, para darle fuerza.
Píncela con la mantequilla 3 hojas, dobla cada una en tres partes y forra el fondo del molde con ellas. (si el paquete de pasta filo tiene más... coloca dos más, dobladas por la mitad). Echa la mitad de los frutos secos (150 gr) y reparte de forma uniforme por todo el fondo. Tapa con tres hojas más dobladas en tres partes, cubriendo bien la base de los frutos secos y añade la masa de la cheesecake.
Sigue cubriendo la masa con una hoja de pasta doblada a la mitad y ajústala con cuidado a los bordes. Ahora con la ayuda de una tijera, recorta toda la masa sobrante, pincela con más mantequilla la parte superior de la hoja y reparte por encima, los recortes, para no tirar nada. Repite este paso dos veces más, echa el resto de frutos secos (dejando una cucharada para decorar al final) y sigue repitiendo el mismo procedimiento, con las últimas tres hojas, intentando que la última capa quede redonda y lo mejor posible.
Para terminar, corta con un cuchillo afilado, las porciones que quieras hacer de la tarta (En mi caso fueron 8, pero puedes hacer 10 o 12. Lo hacemos para que sea más fácil cortar la tarta, a la hora de servir) e intenta cortar las hojas, sin llegar a la masa de la Cheesecake.
Ahora hornea a 170º 1 hora, calor arriba y abajo en la parte central (sin ventilador). Luego apaga el horno y deja otra 1 hora más con la puerta cerrada. Si ves que se dora demasiado, cubre la parte superior con papel de aluminio. En mi caso, lo hice a los 30 minutos de cocción.
De mientras se termina de hacer, prepara el almíbar; Pon en un cazo todos los ingredientes y deja hervir por 5 minutos. Retira la piel del limón y reparte por encima del Baklava justo cuando lo saques del horno. Añade la cucharada de frutos secos que reservamos y deja que se temple. Luego tapa la tarta con papel film y deja en el frigorífico, hasta el día siguiente.
A la hora de servir, decora con más pistachos troceados para que le den un toque más bonito de color y unas rosas pequeñas comestibles, que le van de maravilla a este postre turco. ¡A disfrutar!
Os dejo el vídeo de la elaboración aquí ⬇⬇⬇
Siento haberme enrollado tanto hoy, pero la ocasión lo merecía y aún así... me dejo cosas sin contar que me hacía ilusión compartir con vosotros, como anécdotas que me han pasado en estos 10 años relacionadas con estas cocinas y los momentos que nunca olvidaré, como poder darles ese abrazo tan especial a amigas, que durante este tiempo he podido conocer gracias al blog o contaros la ilusión que me hace, cada vez que recibo una foto o un vídeo, de las recetas que habéis hecho y habéis querido compartir conmigo.
Pero si habéis llegado hasta aquí, tenéis el cielo ganado y todos mis respetos, porque menuda paciencia me tenéis jajaa... y más en redes... que con la de años que llevo con todo esto, sigo sin acostumbrarme a ellas y sin contar que mi vista, como mucho sabéis, no quiere las pantallas de móvil y dolores de cabeza me da, si me quedo mucho rato. Así que después de pasar un buen rato editando una receta para compartir... la vista ya no da para mucho más... (La edad no perdona 😅)
Pues nada más... comienzo a repartir trocitos de este Baklava Cheesecake para daros las gracias por acompañarme y no puedo irme... sin pedir perdón a mi familia, por todos los ratos de ausencia durante estos años, por hacer todas las recetas que veis y dejarme todo el tiempo que necesitaba, para que salieran lo mejor posible y aún así... ¡se quedaron muchas sin compartir!😂
¡Gracias a todos por el cariño y el apoyo! 💘
Espero que os hay gustado la receta de hoy y si os animáis a hacerla, no dudéis en enseñármela, podéis hacerlo en cualquiera de mis redes sociales... ¡Me encantará verla!
¡Nos vemos en la próxima receta!
Vaya lujo de tarta, quiero un trocito! Muchas felicidades por estos 10 años y que sean más compartiendo recetas que de eso se trata.
ResponderEliminarBesos.
Buenos días. Feliz décimo cumpleblog, que sean muchos más. Menudos diez años llevas, repostería fina, que en tus manos parece sencilla, pero que no lo es tanto para algunas. De todas formas pasar por aquí ha sido un aprendizaje, esas manos ágiles que tienes enseñan muchas cosas, dulces que ni conocía y has preparado con esmero, como bien dices, sin prisa pero sin pausa. La baklava es una tarta que no me gusta mucho por parecerme excesivamente dulce, sin embargo no dudaría probar la que tienes ahí, su aspecto enamora. Para celebrar está estupenda.
ResponderEliminarBss
Felicidades Elisa. Cumplir diez años de Blog, a este nivel, no es cosa fácil, pero si lo haces con cariño se nota, porque las cosas bien hechas, se notan que lo llevan en cantidades descomunales.
ResponderEliminarEsta tarta es una maravilla, ya quisiera yo haberla probado. Por lo de los regalos, no te preocupes, demasiado regalo es compartir tanta delicadeza de manera gratuita, para el deleite de quien te visita.
Besos y disfrútalo, al fin y al cabo, es por eso por lo que estamos aquí.
¡¡Hola Elisa!! ¡¡Feliz aniversario!! ¡¡Enhorabuena por esos 10 años de buen trabajo!! Espero de corazón que sigas compartiendo recetas muchos años más con nosotros, que nos sigas deleitando con tus preciosísimas fotos y con tus estupendas creaciones y tu buen hacer.
ResponderEliminarEsta baklava es una maravilla y sorprendente, a simple vista no parece una tarta de queso, y luego, te asombra ese bonito corte que te hace ver claramente que es una tarta de queso, y más viniendo de ti, la reina de las tartas de queso.
Yo he probado tus recetas en primera persona y sé que son fiables al 100%, así que venir aquí a buscar recetas es venir a un lugar seguro, un lugar donde vas a encontrar todo lo que vas buscando y con acierto.
Yo me llevo mi trozo virtual, pues tiene que estar brutal de bueno. Por cierto, fui esta semana santa por primera vez a un restaurante libanés que hacían sus propias baklavas y estaban espectaculares de buenas, tenían de varias formas y sabores y nos encantaron. La comida en general, nos gustó mucho, así que imagino el sabor de tu baklava cheesecake y es para babear con sólo pensar cómo estará. Besitos.