¡Hola familia! Damos la bienvenida al otoño con estas galletas Digestive con avena y chocolate que están de puro vicio... son una de mis galletas preferidas, junto a las famosas y especiadas Speculoos y ya era hora de hacerlas en casa. Estas galletas causan furor en Gran Bretaña a la hora del té y las de chocolate (por lo que he podido leer...) son las que más les gustan... como a mí 😁.
Su nombre crea bastante polémica ya que de digestivas no tienen nada... pero las bautizaron así... porque al incluir bicarbonato de sódico en su receta, se creía que podían tener efectos digestivos...
Después se demostró que al hornearse, dejaban de perder su efecto contra el acidez de estómago... pero lo que no perdió... fue su nombre y así las conocemos todos popularmente, aunque como ya digo... no ayudan (como se creía) a hacer la digestión, si no a darnos un buen subidón de energía, que luego hay que quemar 😜
Esta receta me han sorprendido mucho, porque no pensaba que iban a quedar tan ricas... Quedaron crujientes... sabrosas y con ese toque especial al masticar, que tiene este tipo de galletas con avena.
Las que veis... estaban recién hechas, por eso el chocolate aún estaba derretido. Eso sumado al calor que hacía este fin de semana... pues no ayudaba para nada. Incluso al segundo día de hacerlas... que ya estaban más que secas... al coger una... con solo calor del tacto, enseguida empezó a machar un poco mis dedos... (eso como siempre os digo... a los amantes del chocolate no nos importa para nada 🤣).
No sé si deciros que se les parecen mucho a las comerciales... o sería poner el listón muy alto... pero lo que sí tengo claro... es que si tengo ganas de comerme unas galletas Digestive y dispongo de tiempo para hacerlas... mi primera opción será hacerlas de nuevo, porque me han encantado. Además como veréis... que no se tarda nada en hacerlas.
En otra ocasión... las haré en su versión original que no llevan avena y que quedan algo diferente... (un poco más secas diría yo) y por supuesto... también haré unas sin gluten... para que todos podamos disfrutarlas.
Desde luego que entre prueba y prueba... no tendré problema alguno si no quedan perfectas, ya que lo mejor... es que siempre las podemos utilizar para hacer bases para tartas, como para las cheesecakes... 🤣 ¡No las voy a tirar! jaja... Así que tenemos trabajo por delante... ¿Quién se anima a hacerlas conmigo?
Venga...¡Vamos con la receta!
Galletas Digestive de avena y chocolate
RECETA
Ingredientes para 12 unidades
Para la masa
- 100 gr de mantequilla sin sal
- 75 gr de harina integral de trigo
- 75 gr de harina de trigo
- 75 gr de salvado de avena
- 50 gr de azúcar integral de coco
- 25 gr de miel de azahar
- 1 cucharilla medidora (de 15 ml) de leche
- 1 cucharilla medidora (de 5 gr) de polvos de hornear
- 1 cucharilla medidora (de 2,5 gr) de sal
Para decorar
- 80 gr de chocolate para postres con leche o negro
Elaboración:
Lo primero que vamos a hacer... es sacar la mantequilla un rato antes para que quede a temperatura ambiente... una vez esté blanda, comenzaremos con la receta.
En un bol... añade y mezcla bien todos los ingredientes secos. A continuación incorpora la miel y la mantequilla en trozos y comienza a mezclar con una paleta de silicona, para que se integren. Añade la leche y vuelve a trabajar la masa, de la misma manera, hasta que todos los ingredientes se unan.
Si coges un trozo con tus manos y lo aprietas, la masa debe de quedar firme y apretada... si sigue quedando arenosa, añade unas gotas más de leche hasta que se una.
Echa en la mesa de trabajo y forma una bola. Envuelve en film transparente y deja reposar 10 min en el congelador.
Después... extiende entre dos papeles de hornear (dejando un grosor de unos 4 o 5 mm de altura a la masa), vuelve a meter en el congelador unos 15 min (para que se endurezca) y corta porciones con un cortador de galletas (Yo lo hice con un aro de emplatar de 7,5 cm).
Con la masa restante, vuelve a unir, estirar y congelar unos minutos, para que sea más fácil seguir cortando porciones (no hace falta que la que ya tienes cortada, la metas en el frigorífico).
Con la ayuda de una paleta, trasporta las galletas a una bandeja forrada con papel vegetal (ya que son muy frágiles y se pueden romper si pierden el frío) Haz unos agujeros con un palillo de dientes para decorar (si quieres) y hornea 12 min a 180º (calor arriba y abajo sin ventilador), hasta que estén ligeramente doraditas.
Una vez estén listas, deja reposar 5 min y pásalas a una rejilla, para que se terminen de enfriar por completo.
Por último, derrite el chocolate que más te guste (con leche, negro o blanco) al baño María o microondas y baña una de sus caras...
Si quieres decorarlas... utiliza un palillo de brochetas, para dibujar tiras en forma de rejilla o la punta de una cuchara para hacer ondas.
Deja que el chocolate se seque, antes de servirlas y antes de guárdalas en un táper o una lata para galletas, para que se conserven crujientes, más tiempo y ¡A disfrutar!
Espero que os hay gustado la receta de hoy y las disfrutéis en los desayunos y meriendas de este Otoño, que comienza hoy...
Si os animáis a hacerla, no dudéis en enseñármela, podéis hacerlo en cualquiera de mis redes sociales... ¡Me encantará verlas!
Este tipo de galletas son las que compro para casa, alguna vez las he preparado, pero nada que ver con las tuyas, estoy segura que ni siquiera en sabor se parecen. Si me encuentro con una bandejita como las que tienes ahí, no te dejo ni una, palabrita del niño Jesús.
ResponderEliminarBss
¡Hola Lola! Muchas gracias... las verdad que están muy ricas y yo diría que algo se les parece... no sé os gustarán más o menos, porque ya es cuestión de gustos, pero ojalá te gusten tanto como a mí. Un beso.
EliminarVaya buena mano que tienes te han quedado super bien y yo diría que más ricas que las industriales.
ResponderEliminarBesos.
Querida Elisa, estas Galletas por mucho que tú digas, seguro superan a las comerciales, porque no llevan tantos ingredientes “extras” añadidos, pero que por otro lado, no tengo inconveniente porque soy una auténtica “monstrua” de las galletas y me las como todas, Jajajaja… y más si llevan avena, que me fascina.
ResponderEliminarTe quedaron perfectas, lástima que no sean una Tortilla para llevármelas al Club, Jajajaja…
Besos guapísima y feliz día.
Me encantan estas galletas, aunque yo soy más de las que no llevan chocolate jajajaj
ResponderEliminarMe tengo que animar a hacerlas en casa :)
¡Qué maravilla de receta Elisa! Así da gusto volver a la blogosfera que he tenido abandonada durante casi todo el verano. La pinta es espectacular y a buen seguro mejores que las comerciales ¡no me cabe duda! Espero que el verano haya ido bien ¡Besos mil!
ResponderEliminarHola, después de ver estas galletas... ¿QUién las compra? Seguro que ni punto de comparación, a este paso me voy a vivir al lado de tu casa, decidido!!! Jajajaj!!! Mil besos
ResponderEliminarMe apunto a una tarde de galletas con té o sin té.
ResponderEliminarQué ricas Elisa!
Sean o no sean digestivas sabrosas si que lo son :)
Besos
Mmmmm! Pero que delicia de galletas!!! Si la tecnologia virtual lo permitiera ya estaria yo tomando una a traves de la pantalla, jajaja (que imaginacion la mia)! Me conformo con verlas de momento y tendre que prepararlas.
ResponderEliminarBesos
Unas estupendas galletas.
ResponderEliminarMe encanta el sabor del azúcar de coco.
1 saludito
Hola Alicia, te han quedado de luxe estas galletas, muchas veces he comprado así por el estilo, pero no las he preparado nunca en casa. Muchas gracias por la receta, besos.
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