Helado Cheesecake de arándanos (sin heladera )

Muy buenas tardes!! Hoy vuelvo con otra receta de helados y es que aunque ya por las noches empieza a refrescar un poco... por el día, aprieta bien el calor y siguen apeteciendo mucho...

Bueno... y yo que os voy a decir! si es que me encantan de todos los sabores y colores... son mi perdición la verdad!! Y cuando hago uno en casa, estoy deseando terminarlo, para empezar a hacer otro, de distinto sabor!! :D

En mi pequeño recetario de helados, no podía faltar uno de mis favoritos... el de arándanos que me encanta y esta vez, en versión Cheesecake que aún me gusta más.

Lo he hecho dos veces este verano... el primero fué un visto y no visto, que ni fotografias le pude hacer y el cual, fui batiéndo en su proceso de congelación cada 40 minutos, unas 2 horas y que nos gustó mucho.

Esta última vez, he querido hacerlo pero sin batirlo, como el helado de fresas que hice hace unas semanas... (aunque aquella vez no fué queriendo precisamente jejeee... ) y me ha sorprendido, que tampoco le saliera los molestosos cristalitos de hielo.

Así que es una maravilla de receta super fácil, para las que hacemos helados en casa y sin heladera.

Por último contaros, que no es un helado extremadamente dulce ni mucho menos, lo dejaremos en "especial" como siempre y desde mi humilde opinión, con auténtico sabor a Cheesecake de arándanos, pero si sois muy golosos, podéis echarle una cucharada más, de leche condensada o miel y lo tendréis solucionado.

Vamos con los ingredientes?

Para unos 900 ml. Aprox.  

200 gr de arándanos 

200 ml de nata para montar

200 gr de queso crema ( tipo Philadelphia )

100 ml de miel

100 ml de leche condensada 

2 cucharadas ( 15ml ) de zumo de limón 

1° Lo primero que haremos, será lavar muy bien los arándanos y secarlos con un papel de cocina, a continuación, lo meteremos en un vaso batidor junto con el queso crema, el zumo de limón, la miel y la leche condensada y lo batiremos.

2º Aparte... montaremos la nata que debe de estar muy fría y la añadiremos a la mezcla anterior, con movimientos envolventes.

3º Una vez que tengamos una mezcla homogénea, nuestro helado estará listo para pasarlo a los moldes que queráis utilizar para servirlo. Lo dejaremos congelar de 4 a 5 horas (o mejor aún... toda la noche).
Después, lo tendremos listo para consumir.

(Si a la hora de servir esta muy congelado, podéis dejarlo unos minutos fuera del congelador, para que se hablande un poquito y poder sacarlo mejor!!)

Espero que os haya gustado este postre de hoy, fácil y muy refrescante...

Disfrutad del fin de semana y de lo que queda de vacaciones, nos vemos la próxima semana!!

Un beso enorme ♡

Elisa Domínguez.