¡Hola a todos! Hoy vengo con la penúltima receta, antes de coger vacaciones y es que esta mermelada de cerezas sin azúcar, será... el ingredientes principal de la próxima receta, con la que espero dejaros con un buen sabor de boca hasta septiembre... Así que os espero este viernes día 30 para celebrar juntos, el día de las tartas de queso... (buena pista os he dado ¿eh? 🤭).
Sé que la blogosfera está casi desaparecida, algunos bajo el sol de la playa y otros descansando en casa junto a la familia. Hay poco tiempo para navegar por la red e incluso mucha pereza con tanta calor, para hacer recetas en casa... pero prefiero publicar estas dos últimas recetas ahora... que tenerlas ahí en pendientes... a que vuelva la temporada de cerezas... y es que este año, se me han quedado muchas recetas sin publicar... entre ellas varios helados. Este año por aquí no he podido publicar ninguno todavía, menos mal que por lo menos... lo he podido hacer en La Chocolaterapia, allí he publicado 3 nuevos... estos últimos 3 meses y los podéis ver en mi recetario de helados.
Las mermeladas caseras me gustan mucho y las suelo hacer mucho, pero con las prisas o porque siempre hay otra receta con más elaboración, que pienso os puede gustar más... no las publico en el blog. A veces... pasan de desapercibidas porque las incluyo en la elaboración, quitándoles todo el protagonismo que se merecen. Por ello, en esta ocasión... la he separado de la próxima receta y es lo que espero hacer de aquí en adelante.
La elaboración de esta mermelada es sencilla (aunque algo entretenida para deshuesar todas las cerezas...😅) pero nada que ahora en vacaciones nos quite el sueño jajaaa... Lo peor diría yo es... tener que contenerse una, para no ir picoteando... porque al final, no tienes ni para medio tarro de mermelada. La verdad que a mi las cerezas, me pierden y pocas son las recetas que hago, por ese mismo motivo... ¡me las como, como si fueran pipas!.
Una vez deshuesadas, todo es coser y cantar... dejamos cocinar hasta que estén muy tiernas y luego triturar la mermelada, si no queremos encontrar trocitos.
A mi me resulta deliciosa y acompañada de una tostada de pan casero con mantequilla, con un toque de sal, como la de Lurpak, ya es para morirse de placer.
Pero si os gustan los sabores diferentes y originales... hace unos días aproveché las cerezas que me trajo mi padre, para volver a preparar la mermelada de cerezas estilo selva negra con cacao... con un sabor muy peculiar y que te atrapa, en cada nuevo bocado que le pegas.
Si quieres hacerla con azúcar, este edulcorante que utilizo es equivalente a la cantidad de azúcar blanca de uso normal, así que puedes usarlo, si lo prefieres. Puede que necesites un poco de más cantidad tanto de edulcorante o de azúcar, según el dulzor y el punto de maduración que tenga las cerezas. En mi caso estaban maduras y dulces... por ello añadí menos de la mitad del peso de la fruta sin hueso. En otra ocasión... hubiese añadido la mitad del peso de la fruta de azúcar, pero ha quedado muy rica así.
¡Vamos con la receta!
Mermelada de cerezas sin azúcar
Ingredientes para un bote de 400 ml
- 370 gr de cerezas sin hueso
- 150 gr de Eritritol con Stevia de Canderel (o misma cantidad equivalente a esta en azúcar, de otro edulcorante).
- 1 cucharada medidora (de 15 ml) de zumo de limón
Elaboración:
Lo primero que debemos hacer... es esterilizar los botes donde vamos a guardarla. Si la vamos a consumir en el mismo momento, no es necesario... pero a mí me gusta hacerlo, ya que no se tarda nada. Solo tienes que hervir los botes y las tapaderas, en una cacerola con agua hirviendo unos 10 min.
Para hacer la mermelada; pon al fuego una cacerola con todos los ingredientes. Cuando rompa a hervir baja la temperatura y deja cocina hasta que la fruta quede tierna y reduzca el contenido de agua (unos 30 a 40 min.), removiendo de vez en cuando, para que no se agarre al fondo de la cacerola.
Después... Tritura para que quede más suave, sin trocitos... o déjala tal cual. (también puedes triturar ligeramente unos segundos, para que quede un poco más cremosa, con algunos trocitos de la fruta... ¡como más te guste!).
Echa (aún caliente) en el bote de cristal esterilizado, cierra con la tapa y pon boca abajo, para que se cierre al vacío. (yo los suelo dejar así, hasta que se enfrían y después les doy la vuelta.)
Una vez abiertos, conserva la mermelada en el frigorífico.
¡A disfrutar!
Pues nada más por hoy... Para que os marcháis de vacaciones y no nos veremos hasta septiembre... espero que las disfrutéis mucho y os cuento... que cambiaré mi día de publicación a partir de septiembre y ya no serán los lunes... los nuevos post se publicarán los miércoles (la vida cambia... y la nueva tarifa de la luz... también tiene mucho que ver 😅).
Espero que os hay gustado la receta de hoy y si os animáis a hacerla, no dudéis en enseñármela, podéis hacerlo en cualquiera de mis redes sociales... ¡Me encantará verla!
¡Os veo este viernes... con la última receta antes de vacaciones! 😎
¡¡Hola Elisa!! Aquí otra fan de las mermeladas caseras. Yo siempre tengo alguna mermelada casera en la despensa, me quedan muy poquitas de moras, pero ya queda menos para que llegue septiembre y recoja moras y haga de nuevo. Suelo hacer bastante mermelada, también de ciruela, que tenemos un arbolito, aunque este año tiene muy pocas. Me gusta desayunar los fines de semana con tostadas y mermelada casera y también regalarlas, cuando algún alumno mío me regala algo, ya sean productos de sus huertos, una mujer siempre me da miel, o cualquier regalo inesperado, yo les regalo un botecito de mi mermelada, por eso siempre tengo los botecitos bien bonitos y arreglados, listos para regalar.
ResponderEliminarLa mermelada de cerezas me encanta, es deliciosa, pero me pasa como a ti, que me encantan y nunca me sobra como para hacer mermelada, pero reconozco que no hay nada como la mermelada de cerezas casera. Y qué bien, ahora sin azúcar, apta para diabéticos y para los que intentamos cuidar nuestra alimentación. Yo tampoco pongo el mismo peso pulpa que de azúcar, sinceramente, es excesiva, me gustan las cosas dulces, pero creo que a nuestros antepasados más aún y de ahí que usaran esas medidas, creo que con menos azúcar quedan igual de buenas o incluso más, pues se equilibra mucho más el dulzor.
Yo también cierro ya esta semana el blog, creo que ya toca descansar, pero vendré el viernes a verte, no me perdería por nada esa tarta de queso con la mermelada de cerezas, seguro que está increíble. Nos vemos el viernes. Besitos.
Que rica estan las mermeladas caseras , y esta sin azucar mejor para cuidarnos besitos
ResponderEliminarTambién he preparado esta mermelada en versión azucarada, y prácticamente me la he comido porque no hice mucha cantidad, me cuesta lo mío, ya que la mermelada me gusta mucho, pero las picotas me encantan y es difícil que lleguen a cualquier preparación. Me gustaría hacer esta receta sin azúcar por probarla, seguro que está riquísima igualmente. Lo intentaré al menos.
ResponderEliminarBss
Hola Elisa, qué maravilla de mermelada, te la he visto por Instagram y me ha encantado, estaba desayunando y estaba pensando que me apetecía un montón. Queda muy bien, a mí también me gusta hacerla con diferentes cerezas y la verdad que el color es impresionante, te ha quedado estupenda. Un beso.
ResponderEliminarMe encantan las mermeladas caseras y mucho mas si son sin azúcar y tan bien elaboradas como la que nos traes hoy. Ese pan con mermelada me esta haciendo guiños!
ResponderEliminarBesos