Roscos de vino, ron y nueces

Buenos días! Hoy el reto de reposteras por europa se viste de navidad para traeros lo mejor de cada país en estos días de fiesta... Yo me he quedado en casa... en España y os he preparado un clásico en nuestras mesas familiares, con mi toque personal.

En mi querida Málaga, hacen unos roscos de vino dulce que quitan el sentío... Este año como los anteriores, no nos podemos quedar sin hacer roscos en casa, porque si no... parece que no es Navidad! A mi me gustan mucho los casero, pero los que venden en las fábricas en especial de Antequera y que tenga mucho azúcar glasé, me tienen loquita perdía.

Últimamente parezco más que una reposterilla... una detective dulce, intentando con solo leer los ingredientes que muestran los productos a su reverso hacerlos, como el caso de estos roscos antequeranos, que para mi humilde parecer, son lo mejor del mundo mundial. La verdad que es algo con lo que disfruto mucho en la cocina... intentar elaborar una receta de ese modo, me parece un reto de lo más divertido y si ya conseguimos (no digo parecerse) si no... que a los míos les guste... yo con eso, me doy por servida.

Mi versión pasa por echarles nueces y emborracharlos en ron miel, para darles un toque personal y utilizar para la elaboración azúcar morena... que sinceramente... ellos sólo especifican que lleva azúcar y de ahí tenemos que obviar que el azúcar glasé debería de contar como tal o ¿no? Pues he aquí el quid de la cuestión... 😌 pero como soy de ideas fijas... se me metió hacerlo con ella y contenta estoy de ello... y del tamaño XL también... (las cosas como son. ..) porque a mi con uno me falta... dos ya sería un pecado y estos son uno y medio 😅

Los roscos han quedado deliciosos... tienen un cierto parecido a los que me gustan... aunque los que yo he hecho están más jugosos... puede ser que como dice mi madre... sea porque estos son recién hechos y no llevan ni dos días, por ello, están aguantando bastante bien, sin ni siquiera liar... porque yo sigo en mis trece y los tengo tal cual veis... sólo con un papel de cocina por encima jajaa...

Ya os conté hace dos años con la receta de roscos de vino dulce de Málaga que en mi familia siempre los hacemos fritos... La verdad que para ser los primeros que hago al horno están riquísimos... Si tuviera que decidirme por cual de las dos recetas elegir... pues sería muy difícil... son diferentes tanto de sabor como de textura... creo que me quedo con los dos... y el próximo año (si no crece mis ganas de innovar nuevamente...) haré las dos recetas otra vez jajaa...

Ah! Me olvidaba de contaros que están llenitos de azúcar glasé, porque me encantan los roscos bien envueltos y que a penas se les note el agujero... Cuando me encuentro algunos así, después de desenvolver el papelillo, los ojillos se me hacen chiribitas jajaaa...

 ¡venga vamos con la receta!

Ingredientes para 18 unidades aprox. 

500 gr de harina de trigo 

200 gr de manteca de cerdo ibérica 

200 ml de vino dulce de Málaga 

150 gr de azúcar moreno de caña 

150 gr de nueces de california picada

10 de clavos de olor machacados

5 gr de ajonjolí

4 cucharaditas rasas ( de 1 ml ) de cacao puro desgrasado 

2 cucharadas rasas ( de 5 ml ) de canela molida

2 cucharadas rasas ( de 5 ml ) de anís en grano

Pizca de sal

Para rebozar los roscos

Ron miel

Azúcar glasé

1º Mezclaremos en un bol, la manteca de cerdo (que debe estar a temperatura ambiente y a punto de pomada ) junto a la harina. Seguidamente echaremos el vino dulce y el azúcar.

A continuación, incorporaremos a nuestra masa los clavos machados, la canela, el ajonjolí, el anís, el cacao y una pizquita de sal para que no estén sosos... Por último, echaremos las nueces picadas (pero no hechas polvo para que tengan su gracia)

2º Amasaremos artesanalmente sobre la encimera, hasta que la masa no se nos pegue en las manos, una vez conseguido haremos una bola con ella, la taparemos con papel film y la dejaremos reposar como mínimo, media hora en la nevera.

3º Pasado el tiempo estiraremos las masa con un rodillo, hasta conseguir un grosos de unos 5 mm. Y con ayuda de un molde circular (o como yo de un vaso de agua) cortaremos círculos, haremos un agujero en el centro con nuestro dedo y los pondremos sobre papel de hornear.

Hornearemos 170º calor arriba y abajo con ventilador unos 15 minutos (o bien a 190° si no tenéis horno con ventilador) hasta que estén doraditos.

Sacaremos del horno y dejaremos enfriar sobre una rejilla.

4º Cuando haya enfriado los bañaremos por ron miel y posteriormente por abundante azúcar glasé... Después los dejaremos sobre la rejilla nuevamente hasta que esté completamente secos y ya los podemos consumir o guardarlos bien en una cajita o en envueltos en papel de seda, de forma individual.

Bueno... esperemos que os haya gustado estos roscos, que han sido la última alegría que nos hemos llevado para el cuerpo, los miembros de mi familia y esta humilde servidora... jajaaa... 

Espero que los hagáis... No os vais a arrepentir... (Palabrita de loca reposterilla jajaaa...) y antes de irme, no podéis marcharos sin visitar el resto de recetas que han hecho mis compañeras... todas muy dulces como siempre... podéis verla pinchando AQUI o en el logo del reto

Se os quiere! 

Un beso, Elisa Domínguez.